Programas ocultos (o “pasivos”, en la jerga) que reconstruyen al instante conversaciones de Facebook, MSN o WhatsApp, sin que se enteren ni el usuario ni el proveedor. Software que permite no sólo interceptar y grabar una conversación sino al mismo tiempo identificar quien está hablando y desde donde. Troyanos que infectan computadoras para robarles sus comunicaciones secretas y claves de encriptación. Todo lo que uno hace con el celular, internet, handy o teléfono satelital, o sea todas las comunicaciones.
Todo puede ser interceptado y en algún lugar del mundo, está siendo interceptado. Ni siquiera se salva la conversación cara a cara, porque hoy se ofrecen al mercado poderosos micrófonos para escuchar a cualquiera en cualquier lado. Hasta venden equipos para pinchar satélites.