Así, China habría pasado de representar el 43,1% del Producto Bruto Interno de los EEUU en 2005 al 86,9% en 2011. Esta escalada dio lugar a que muchos vaticinaran, sobre la base de cálculos realizados por el Fondo Monetario Internacional, que para fines de este 2014 China sería la principal potencia mundial.
El cálculo se realizó cruzando el PBI de las naciones con el poder adquisitivo de los ciudadanos. El gigante es el principal tenedor de bonos del Tesoro de los EE UU pero tiene fuerte presencia de capitales norteamericanos.
En latinoamérica, después de Brasil y Venezuela, Argentina es el tercer país en recepción de inversiones de China.