martes, 26 de enero de 2016

un esfuercito, muchachos

Luego de participar de una misa por la reciente canonización del cura José Gabriel Brochero y encabezar luna reunión del gabinete nacional en Córdoba, Mauricio Macri reclamó a los trabajadores "que no se opongan a la necesidad de progresar porque queda mucho por hacer".
No es un pedido a los agroexportadores ni al sector financiero que son hasta el momento los grandes favorecidos por el modelo macrista. El gobierno de los CEOs quiere que pongan el hombro los trabajadores que sólo tienen eso, la fuerza del trabajo.
En una año que ya se sienten los despidos del sector público y privado, que se estima una inflación del 40 por ciento y están presionando para que los obreros discutan salarios con el 20 por ciento como techo.
El objetivo está explícito: salarios más bajos y una desocupación más alta para el ingreso del capital especulativo.
.

uno de los monjes negros


Mauricio Macri ya había tomado una de las decisiones más polémicas del primer mes de mandato: nombrar a Carlos Rosenkrantz y Horacio Rosatti como jueces de la Corte Suprema mediante un decreto de necesidad y urgencia (DNU). Consciente de la controversia que traería la medida, citó a la Casa Rosada al ministro de Justicia, Germán Garavano, para notificarlo de la existencia del DNU y solicitarle que oficiara de vocero. Cuando Garavano ingresó al despacho presidencial se encontró con un invitado inesperado: Daniel Angelici.
La escena sirve para destacar la ascendente influencia de Angelici sobre Macri. Personaje destacado de la nueva estructura de poder, el presidente del club Boca Juniors tiene una cualidad casi única en el mundo Pro: es resistido y respetado en partes iguales, pero su presencia no resulta indiferente para nadie.
La Justicia, la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), la Inspección General de Justicia, el juego, el fútbol... Angelici amplió su radio de acción.
La Nación cuenta que a partir del 10 de diciembre, sumó nuevas responsabilidades.

de lavado y lavadores

Mauricio Macri formalizó este martes, a través de un decreto publicado en el Boletín Oficial, las designaciones de Mariano Federici y María Eugenia Talerico como presidente y vicepresidente, respectivamente, de la Unidad de Información Financiera (UIF), el organismo encargado de investigar el lavado de dinero.
-Federici se desempeña actualmente en el departamento jurídico del Fondo Monetario Internacional (FMI). Además en sus antecedentes laborales, entre septiembre de 2001 y junio de 2002 fue asociado extranjero y miembro del Grupo para Latinoamérica en Sullivan-Cromwell, New York, participando en ofertas públicas y privadas de compañías extranjeras en Estados Unidos.
-Talerico es abogada del HSBC en tres causas que tramitan en queja ante la Corte Suprema y de otros expedientes abiertos dentro de la UIF por lavado de dinero.
-Un clima de sospechas y suspicacias que dan vueltas en el aire. 

se les nota en todo

El presidente Mauricio Macri recibió ayer a un grupo de sobrevivientes del Holocausto y desde la cuenta de Twitter de la Casa Rosada se quiso resaltar la historia de una de las mujeres que participaron del encuentro. “Sara Raus, cumple 89 años fue víctima dos veces de la intolerancia: es sobreviviente de Auschwitz y tiene un hijo desaparecido”, se leyó.
La respuesta en la red social fue un poco indignación y un poco burla. “Intolerancia” no le pareció a nadie el término adecuado para describir dos genocidios. Eso sin contar la coma mal puesta y que el apellido de la protagonista estaba mal escrito: se llama Sara Rus, no Raus.
(Del pirulo de tapa de Página).