Hombre negro, de traje color crema y relato acelerado,
Meirelles aceptó un cuestionario amplio, a pesar de que
el motivo original de la declaración era la planta potabilizadora de Paraná de las Palmas. “
Hice 4000 operaciones de sobornos para Youssef”, dijo.
Cuando le preguntaron específicamente si recordaba a qué argentinos les había transferido dinero contestó. “No me acuerdo ningún nombre pero, hay uno, hay uno…” y mencionó el nombre de Arribas.
“Le hice unas diez transferencias por 850 mil dólares a Suiza”, precisó.
Confirmó que el dinero salía de una cuenta bancaria que él manejaba en Hong Kong, a través de una empresa fachada llamada Import & Export Limited (que la justicia brasileña confirmó que se utilizaba para lavar dinero, pagar coimas y evadir impuestos), y en el caso de Arribas lo enviaba a una cuenta en el Banco Credit Suisse.
–¿Está seguro de que él recibía el dinero? –le preguntó el fiscal Delgado.
–Sí, estoy seguro. No hay forma de que no haya recibido la plata –fue su respuesta contundente.