miércoles, 8 de octubre de 2008

Dirigentes rurales con baja convocatoria



Ante unas 5000 personas en San Pedro, el campo criticó con dureza al Gobierno


Con baja convocatoria y con aislamiento social, el sector reclamó una política agropecuaria. De Angeli le pidió a la Presidenta que no utilice la crisis internacional de excusa y los productores manifestaron su esceptisismo ante los anuncios que prepara el Gobierno para el sector

Sin el respaldo que tuvieron en otras manifestaciones, y sin que hicieran ninguna autocrítca en ese sentido, los ruralistas criticaron con dureza al Gobierno al que le solicitó que antes de anunciar medidas se siente a consensuar con el sector. "Antes de que la Presidenta anuncia algo, le pido que nos escuche", dijo Alfredo De Angeli ante unos 5000 productores rurales que lo aclamaron.
"Lamento por los que no pudieron venir, somos los que estamos", sostuvo el titular de la Federación Agraria de Entre Ríos, que además reiteró que Cristina Kirchner "pone de excusa la crisis internacional" y aseguró que el Gobierno "va a necesitar del campo tal como lo necesitó en el 2001".
Tras los discursos de Eduardo Buzzi, de la Federación Agraria, de Hugo Biolcati, de la Sociedad Rural y de Mario Llambías, de CRA, De Angeli le pidió a la sociedad que siga acompañando el reclamo agropecuario como en marzo y convocó "a todos los argentinos" para que se sumen al abrazo simbólico que hará el campo al Congreso esta tarde.
"Habiendo cumplido con este desafío de no comercializar sin cortar rutas, hoy terminamos esta etapa de la protesta, con un abrazo al Congreso y continuaremos con otra etapa de lucha", señaló Biolcatti en su discurso.
En el cierre del acto, Carlos Garetto, vicepresidente de Coninagro, se sumó al pedido de De Angeli y solicitó "a toda la sociedad que acompañen el reclamo del campo, porque el país y la patria lo exigen".
Desde temprano empezó a llegar gente a San Pedro, lugar que eligió la Comisión de Enlace agropecuaria para concluir el quinto paro del campo contra el gobierno de Cristina Kirchner. Así, ruralistas de Rosario, Corrientes y Córdoba se acercaron al epicentro de la protesta.
La convocatoria fue claramente menor que la de Rosario en el día de La Bandera, donde el lockout rural, con una puesta en escena imponente, logró juntar cerca de 200.000 personas que se manifestaron para reclamar cambios en la política agropecuaria.
En esta oportunidad no hubo gente de la Capital, sino que pareció más bien una movida del interior del país. En una primera recorrida, se constató que la gente "está cansada" por la extensión del conflicto y además mostraron muy poca expectativa respecto de los anuncios que el Gobierno prepara para el sector.
Al igual que en otras oportunidades, un payador animó a los presentes desde arriba del escenario.
Hoy el agro insistió con sus reclamos, -la reducción de las retenciones y medidas concretas para la carne, la y las economías regionales-, a los que se agrega la preocupación por el impacto de la crisis financiera global en los precios de las commodities y los efectos de la histórica sequía que afecta a varias provincias.
La elección de San Pedro para cerrar la huelga agraria, que esta vez incluyó cese de comercialización de carnes y granos, tiene que ver con que esa localidad fue uno de los puntos calientes de protesta rural durante las medidas de fuerza anteriores. A un grupo de productores que protestó allí en marzo pasado se les inició una causa judicial.
La oposición también se hizo presente en San Pedro con la presencia en esta ciudad de la ex diputada Margarita Stolbizer y el líder de la Corriente Clasista y Combativa (CCC), Carlos Alderete, entre otros dirigentes.

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