viernes, 22 de mayo de 2009
el viejo hábito gorila de la proscripción y de creer que nosotros no existimos
No hay forma, che.
No quieren que existamos, que no votemos, que no nos presentemos como candidatos. Que no estemos en el país, que nos exiliemos.
Eso quieren los que no nos quieren.
Ya en 1945 se les ocurrió sostener que la movilización popular del 17 de octubre era "una horda de desclasados" y "un aluvión zoológico". Negaban la existencia en la política de la clase trabajadora que había empezado a decir presente.
Los trabajadores no existen.
En el golpe de 1955 sacaron el decreto 4161, donde nos prohibieron todo, hasta los símbolos nuestros.
El Tirano Prófugo no existe.
En el 56 fusilaron a Juan José Valle y otros militares patriotas que solo querían elecciones para que el Pueblo se exprese. Y en los basurales de León Suárez muchos de los nuestros dejaron sus vidas acribillados sin posibilidad de defensa.
Los militantes no existen.
Con el fondicismo nos quisieron "integrar" para parecer más bonitos, estar bajo el ala de uno de los dos radicalismo que se dividieron entonces.
Los peronistas no piensan.
Con el Onganiato, golpe del 66, queríamos que "participemos" del garrote y la desperonización.
Juan Domingo Perón no existe.
Con el dictador Lanusse "no nos daba el cuero". Después de 18 años de proscripción al peronismo y del exilio a su Jefe.
Juan Domingo Perón no era valiente.
Con el Proceso desmantelaron la industria, la solidaridad, el Estado, mataron y torturaron, tarea que se perfeccionó ideológicamente en los '90 con el Consenso de Washington.
El Pueblo no existe, lo que existen son los individuos.
Y ahora tenemos a Gil, el Lavedra, que en nombre de la oposición no quiere que los nuestros, los mejores candidatos para dar testimonio, no sean candidatos:
"El candidato que se presenta como segundo en la lista del Acuerdo Cívico y Social por la Capital Federal, cuestionó las candidaturas testimoniales a las que consideró "un fraude", porque "violan directamente las formas representativas del gobierno".
Ustedes ya no existen, ahora es el post-kirchnerismo el que existe.
Ven que no nos quieren. No nos aguantan.
Pero ellos no saben que lo esencial es invisible a los ojos y que los pueblos son caprichosos y siempre vencen.
A la corta o a la larga.
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7 comentarios:
Muy bueno, José.
Un abrazo
Mario
cuando murió el general dijeron:
"muerto el perro se acabó la rabia"
pero volvimos
siempre volvemos
somos la rabia
Perfecto, JOsé, argumentos similares esgrimí hace dos días peleandome con compañeros de mi edificio donde trabajo, anécdota que la ampliaré mañana en el blog. Saludos!! y sí, somos la rabia!!
Es bueno encontrar cumpas con esa rabia.
Saludos, Mario, Somosla... y Otrocampo.
Muy bueno, te felicito, no hay más nada que agregar. Un abrazo.
No nos olvidemo0s nunca que hicieron exactamente lo contrario a lo que pregonaban. Va un ejemplo: "La revolución del 24 de marzo ha comenzado por prometer seguridad al que trabaja, estímulo al que produce, garantías a la existencia individual y colectiva. Se ha propuesto desterrar los miedos. La delincuencia y la subversión ya no habrán de deslizarse a través de las fisuras cómplices del mundo oficial" (Diario LA PRENSA del Sabado 27 de marzo de 1976)
Excelente tu blog!!!
Ahora no tienen a las FFAA, hay que cagarlos a zopapos y basta de poner la otra mejilla.
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