«Yo soy un soldado de Cristina». Hebe de Bonafini cerró, con esa frase, su última charla con Sergio Schoklender. Fue la coronación de una despedida traumática, cargada de tensiones, que germinaba hacía tiempo, pero que, entre idas y vueltas, se concretó finalmente el 13 de mayo pasado.
Además de apoderado de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Schoklender era gerenciador ad hoc de los planes de viviendas Sueños Compartidos, que tiene emprendimientos en Capital, el conurbano, Chaco, Misiones, Bariloche, Rosario, Santiago del Estero y Tartagal.
(Esta es la versión de Ambito)
4 comentarios:
me vas a seguir censurando los comentarios? fijate que no pongo ni una sola mala palabra
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shocklender va a ser el perejil al que le soltaron la mano para que no siga averiguandose para arriba e involucrar al gobierno y a las madres en los curros inmobiliarios
que lastima, esto lastima a cristina, a mi schoklender me importa un pito, aca lo unico importante es no dañar a cristina.
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