"Todo había comenzado en Guanajuato, México, donde fue enviado como emisario de la familia presidencial un ciudadano mejicano-venezolano de su mayor confianza y con excelentes contactos en la Santa Sede.
La relación personal entre funcionarios diplomáticos venezolanos que antes estuvieron en la misión de Venezuela ante el Vaticano sirvió de fuelle para los contactos al más alto nivel cardenalicio.
Como en todo, la amistad mueve montañas y abre puertas. Fue así que se logró el objetivo. El compromiso acordado era un encuentro breve limitado, para darle la Bendición Apostólica, haciendo énfasis que no tuviera cobertura mediática. Este punto fue cumplido a cabalidad por las tres partes involucradas como era nuestro gobierno y los de Cuba y la Santa Sede.
La reunión no duro más de 5 minutos solo estando presentes los hermanos Fidel y Raúl Castro, Su Santidad y el Presidente Chávez, quien recibió los deseos papales por su pronta recuperación así como la bendición solicitada".
El Santo Padre le regaló un rosario bendito al enfermo barinés.
(de este blog)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario