En la causa Ciccone, que involucra al vicepresidente Amado Boudou, se investigan dos delitos: “negociaciones incompatibles con la función pública y lavado de dinero”. Página/12 señaló que “todo indica que aquella operación, que se deshizo cuatro meses después porque tenía una cláusula de rescisión, fue un intento de salvar la imprenta por su valor estratégico” pero que “no prosperó y la familia Ciccone volvió a estar a cargo”.
El periódico añadió que “menos de un año más tarde, el juez comercial Javier Cosentino decretó la quiebra” de la compañía. (hallazgo de DsD en Página).
Con el mismo argumento que el gobierno decidió el salvataje.
Con el mismo argumento que el gobierno decidió el salvataje.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario