1) En la jornada del viernes el Banco Central realizó una compra de 160 millones de dólares, que permitió, tras el pago de algunas obligaciones que amortiguaron la intervención, un incremento de 78 millones en el stock de reservas, el cual finalizó en 28.508 millones.
2) Compra dólares de a cientos de millones por día, pero acumula reservas de a diez o de a veinte. Parecería debilidad, pero obedece a una estrategia premeditada. En Página nos hablan de operaciones para acumular fuerza a futuro en el mercado cambiario, hasta ahora no contadas.
3) En las últimas semanas se habría dado una decidida política de cancelación de deudas y adelanto de pagos, liberándose de compromisos del segundo semestre y abriendo, incluso, el margen de confiabilidad necesaria para volver a “comprar a crédito” a los proveedores habituales de energía. Con los pagos realizados entre abril y mayo, el Central dejó en “cero” la deuda por compras de gas a Bolivia, una situación sin precedentes en los últimos años. También adelantó pagos de futuras importaciones de combustibles y otros insumos correspondientes al sector energético.
4) Diversas deudas en cuentas de organismos internacionales también fueron canceladas, pagando incluso por adelantado los vencimientos (Banco Internacional de Basilea, entre ellos). Además, pagó deudas con el sistema bancario local dejando en cero el saldo pendiente por operaciones de Repo y otros mecanismos de cesión temporaria de activos.
5) Esta holgura no declarada es la que le habría permitido superar con cierta facilidad el repunte del dólar paralelo de estos días, desinflando el “runrún devaluacionista” que ya comenzaban a agitar, con indisimulado entusiasmo, algunos grupos de presión.
3 comentarios:
en los meses que se liquida la soja solo subieron 1500 palos las reservas. agarrense para el 2do semestre, o se van a tener que endeudar fuerte y a cualquier tasa, eso si el 12 de junio no caemos en default
Gracias qwert por tus pronósticos en estos 11 años. Ahora vamos por las docenas de años. Y luego....
Por supuesto, admito y entiendo que haya ciudadanos que no apoyen a nuestro gobierno. Que tengan ideas totalmente opuestas con relación a su filosofía y operatorias.
Lo que no admito ni entiendo es que, con tal de que nuestro gobierno se perjudique, no les importe que también se joda nuestro propio país y - especialmente - sus habitantes. Eso, más que una posición política, es directamente tener mentalidad antipatriota, cuando no directamente destituyente.
Para oscurecer las tintas, todos estos críticos de papel maché sólo "están en contra", sin sugerir ni indicar nada mejor ó superador con algún grado de sentido común.
Después estos personajes invisibles "quieren preguntar" y cacarean por la seguridad institucional y otras yerbas variopintas.
Sin dudas, esto también complica muchísimo a Amado Boudou.
Saludos
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