miércoles, 23 de julio de 2014

la reunión de anoche

Cristina la convocó ayer en la Casa Rosada que se extendió hasta las 21, a todo el equipo económico para decidir los próximos pasos en lo que será la semana más crucial en la negociación con los buitres.
Estuvieron Ricardo Etchegaray, Diego Bossio, Juan Carlos Fábrega, Carlos Zaninni, Axel Kicillof junto a parte de su equipo.
Kicillof finalmente no viajó a Nueva York para reunirse con los abogados de Cleary Gottlieb Steen & Hamilton, que representan al país en Estados Unidos, en el despacho del mediador, Daniel Pollack.
La principal preocupación del titular del Palacio de Hacienda pasa por que la negociación con los buitres no activen la cláusula Right Upon Future Offers (RUFO), que según el comunicado de prensa emitido ayer implicaría un piso de u$s 120.000 millones y podría llegar a los u$s 500.000 millones.
Lo que ordenó la presidenta fue que la deuda externa no se incremente exponencialmente. Por eso, el comunicado de prensa difundido ayer por la cartera económica incluía este párrafo: “Los fondos buitres sostienen que es imposible que la cláusula RUFO aplique (ver web ATFA). Es por esta razón que Argentina le solicitó al juez Griesa que los fondos buitres tomen un seguro financiero y cubran los riesgos y los costos de una eventual aplicación de la claúsula RUFO. Si tal riesgo fuera nulo, tal cual ellos afirman, el precio de este seguro debería ser despreciable. El juez no sólo no concedió una suspensión de su sentencia sino que además, no pronunció una sola palabra sobre la cláusula RUFO que figura en los prospectos de todos los títulos emitidos en los canjes de los años 2005 y 2010 en poder del 92,4% de los acreedores”. 

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Habrá muchos infames traidores a la patria, contentos, incluido el cordobés más desagradable que de la Sota, llamado Alfredo Leuco, que si se lo pidieran entregaría el rosquete por nada, igual que el buchoneo que le hizo a Griesei contándole pavadas que solo él, el gordo bufarra de Lanata, el sionista Eliachev y otros esbirros del sodomita Magnetto hacen, escribe, dicen y festejan.
Son los descendientes de la bailarina de flamenco devenida en directora de Clarín, Ernestina Laura y su adscripto Héctor Horacio.

Nardo. dijo...

Como en el fútbol el partido termina a los 90 minutos. Y a veces hay alargue,leí por ahí. Tranquis.

qwert dijo...

todo esta manejado por una manga de incompetentes desde lavagna hasta kichi, es posible cualquier desenlace, proximamente juicios por mala praxis

Pedro de Nuñez dijo...

¿A cuánto está el perejil, qwert?.

trewq dijo...

Che qwert ¿cuando vas a terminar la primaria?

Anónimo dijo...

El perejil esta a 12 y pico, el amigo de Maxi debe estar cag·& se de risa..

Bonazo dijo...

Hay algunos que están festejando adelantado de algo que no va a suceder. Nuevamente CFK va a demostrar que es una capitana de barco en tormenta.El mundo y Argentina son otros de hace una década atrás.

Anónimo dijo...

Aca no se trata de quien maneja el barco, sino de mecansimos ideados por los mas viles traidores para poner al pais de rodilla ante la usura, Martinez de Hoz que ya se murio pero queda una manada de sus secuaces vivendo alegremente aca y en segundo lugar, Cavallo, que nos mira con tanto desprecio que sigue haciendo jogging por Palermo y viviendo en su piso de Ocampo y Libertador despues de haber devastado a la Argentina peor que si hubiera sido invadida despues de perder la guerra. Tiene que haber algo muy podrido si las leyes no contemplan casos tan flagrantes de traicion. Se acepto, se firmo y quedamos pegados. Nombrar a la Presidenta que no tuvo ninguna injerencia en la firma de esas aberraciones es un astuto recurso de los oligarcas para embrollar el partido. Mucha gente no se acuerda que los productos importados qe compraban a changuitos llenos y los viajes pro todo el mundo que hacian hasta los mas lauchas se pagaria algun dia. Bueno, ese dia llego. No nos olvidemos de los que firmaron esas prestamos y especialenmte de quienes los llaman a la television a opinar sobre sus propias fechorias que pagaremos por el fin de nuestro dias. Y ellos impunes y riendose en nuestras narices.