Mientras las encuestas porteñas marcan un crecimiento de Horacio Rodriguez Larreta y de Mariano Recalde, y Martín Lousteau muestra un descenso desde las PASO, no es todo por casualidad.
La cobertura mediática se ha ido debilitando, al menos en su caso, frente a denuncias sobre sus asesores que influyen en el financiamiento oscuro de su campaña y la detención de un colaborador por actividades delictivas ligadas al narcotráfico.
Y surgieron ayer desde el mercado financiero más flancos débiles de Lousteau. Concretamente es su paso por el Banco Provincia, a fines de 2005, desde donde dispuso que deudas de varias empresas en situación legal fueran incluidas en un fideicomiso. Aún eran épocas del "pos-corralito" y la pesificación. Entre los beneficiados de ese millonario traspaso, el Grupo Clarín. Sugestiva generosidad del economista y pérdidas en ese año para el Bapro.
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