Ahí razona que el pensamiento económico dominante está siendo cuestionado en todo el mundo a partir de las falencias que presentó para anticipar la actual crisis internacional y la falta de respuesta que evidencia para construir una salida.
En las universidades, la enseñanza de Economía, en general apoyada en estos fundamentos, que en lo político tienen su expresión en el modelo neoliberal, no escapa a tales críticas. Con esa lógica se desató un conflicto en la Universidad de Harvard, cuando un grupo de estudiantes de economía se retiró en bloque en el medio de una cursada, en protesta por el enfoque de la cátedra.
En Argentina también han crecido ese tipo de controversias. Universidades nacionales relativamente nuevas, muchas de ellas ubicadas en el Gran Buenos Aires, han sido más permeables a la incorporación de escuelas de pensamiento críticas. En casas de estudio con mayor tradición, como la Universidad de Buenos Aires, La Plata o Córdoba, el pensamiento único resiste más.