Vanesa Defranceschi es la esposa de Felipe Noble Herrera, hijo de Ernestina Herrera de Noble, la fallecida dueña del Grupo Clarín. El domingo pasado estuvo en el búnker del Frente de Todos, celebrando la victoria de Alberto Fernández, como se observa en la foto de ella abrazada al presidente electo.
Se definió como justicialista, y contó que llegó a votar por Cristina Fernández de Kirchner en 2011 y que incluso, en pleno conflicto entre aquel gobierno y el multimedios, estuvo a punto de tener un encuentro con la mandataria en la Quinta de Olivos.
El diputado nacional Juan Cabandié es uno de los contactos de este nuevo nexo. También será parte de “Argentina sin Hambre”, el proyecto que desarrolló Alberto junto a Daniel Arroyo para trabajar sobre una de las deudas pendientes de la Argentina. Se definió como justicialista, y contó que llegó a votar por Cristina Fernández de Kirchner en 2011 y que incluso, en pleno conflicto entre aquel gobierno y el multimedios, estuvo a punto de tener un encuentro con la mandataria en la Quinta de Olivos.
Por ahora como para tomar nota.
la diputada retirada elisa carrio invulucrada en casos de espionaje mirtha legrand, susana gimenrez, hugo moyano ect
ResponderBorraryoutube.com wacht u-dj23yed u i d 4
ResponderBorrarque cagada con la cristina de nuevo
ResponderBorrarpobre pais
hay que joder
La última década felíz de los argentinos fue la de los K. Con Alberto comienza otra etapa pero también basada en una mejor distribución de la riqueza.
ResponderBorrar¿Te puedo pedir un favor personal? Por favor, no escribas "hijo adoptivo" a menos que sea absolutamente imprescindible. Ya sé que es un caso especial, muy probablemente con un crimen de por medio; ya sé que seguramente no los crió ella.
ResponderBorrarPero para los que tenemos una historia de adopción de por medio, se es hijo/a o no se es hija/o; se es madre/padre o no se es madre/padre. Una relación padres/hijos es o no es. Punto.
Existen siete mil millones de personas en el mundo; sólo uno de ellos es mi hijo. Y da lo mismo si fue adoptado o no, eso es un asunto de él, de su madre y mío, y hacerlo público le duele a los hijos y también a los padres.
En una charla, decilo como quieras; por escrito, por favor: "hijo". Muchas gracias.
Dale Gaucho. Yo también tengo historias cercanísismas de hijos del corazón. Sin la más mínima diferncia. Cercanísimas.
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