máximo: reportaje a un ausente en los medios

Leemos este domingo a Marcelo Figueras:
Tiene tan poca gimnasia con los medios, que le cuesta encontrar dónde ponerse para que el micrófono tome bien su voz en el estudio. En ese sentido, parece la antítesis del político moderno. Pero es flor de político: una síntesis perfecta entre el militante tradicional, acostumbrado a patear calles y rutas para escuchar antes de hacerse oír, y el negociador avezado que, de ser necesario, te cierra un acuerdo monumental por Zoom. 

Es rarísimo que se preste a una entrevista pero me hizo este honor este jueves en el marco de Plegarias atendidas, el programa que conduzco para la AM de Radio Provincia. 

Y aunque las preguntas más personales se le hicieron cuesta arriba, no las evadió. Habló de las dificultades de estar lejos de sus hijos («Uno piensa más cómo se la bancan ellos»), de su infancia en Río Gallegos («Una vida de familia muy tranquila, hasta conservadora»), de sus recuerdos de Néstor («Nadie extraña algo malo. Y a él se lo extraña, el sentimiento está») y hasta se permitió hacerse el gallego y hacerme reír. También eligió la música que puntuó la charla: el Indio Solari, Zeppelin, Vox Dei, Depeche Mode y The Doors, a quienes descubrió de chico a través de la película de Oliver Stone que alquiló en un videoclub al que lo llevó Cristina. Pero por supuesto, también habló del presente y del futuro, con esa voz calma y cálida pero ante todo lúcida que es su marca de fábrica.
Dejo por acá algunas cosas de las que dijo.