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En su discurso de cierre del debate de la "LEY DE MEDIOS K: se vota o se vota", el jefe del bloque del Frente Para la Victoria en Diputados, Agustín Rossi, hizo un ejercicio periodístico muy interesante.
Rescató los titulares de los diarios Clarín y La Nación del día 16 de septiembre de 1980 cuando se había firmado el decreto-ley de radiodifusión firmado por el dictador Jorge Videla.
Leyó los títulos de los dos diarios que efectivamente obviaron calificar la decisión y dijo que ambos matutinos dieron un “tratamiento neutro” a la información.
Se preguntó “¿Será así mañana? (por hoy). ¿O los diarios serán más indulgentes con una ley de la dictadura que con una de la democracia?”.
El diario Popular recogió el guante e hizo esta tapa nada neutra.
Una vez más se demuestra que el periodismo no es independiente.