Ignacio Zuleta en Ambito señala que el
Consejo del PJ nacional será convocado a una sesión el próximo 4 de mayo con un solo tema en el orden del día:
votar la prórroga de los mandatos de todas las autoridades por un año más. Los actuales mandatos vencen 10 días después, el 14 de mayo. Es un intento de cerrar cualquier debate que puedan provocar sectores del peronismo con vistas a las candidaturas nacionales del año que viene, aprovechando la necesidad de la renovación de autoridades. En esa reunión quedará prorrogada la conducción de
Daniel Scioli con el grupo de gobernadores que actúan como vicepresidentes. Hasta ahora se estudiaba un formato que consistía en promover a
Cristina de Kirchner como titular del PJ y a
Scioli como presidente de ese partido en el orden provincial, en lugar de un
Hugo Moyano al que no se le ha aceptado aún la renuncia (firma los papeles la ministro
Cristina Alvarez Rodríguez). Pero habilitar ese debate podría animar a algunos dirigentes a sacar al partido del actual letargo en cuanto al debate sobre el futuro del peronismo.
La decisión se tomó en una reunión que hizo un grupo crítico del oficialismo en
Mar del Plata que controla la única oficina con la luz encendida en el PJ, la autodenominada
«Gestar». Ese grupo administra la escuela de formación partidaria del PJ con uso de los fondos para la actividad partidaria que provee el Estado. De esa reunión participaron dirigentes clave del oficialismo, como los gobernadores
Jorge Capitanich y José Luis Gioja, el jefe del Ansés Diego Bossio, director de «Gestar», un sello creado en vida de Néstor Kirchner, el titular de Aerolíneas Mariano Recalde, y el presidente de la cámara de Diputados Julián Domínguez.
Encuentro no contó con delegados del
sciolismo, pese a que la reunión se hizo en uno de los santuarios del gobernador, el hotel Provincial de Mar del Plata. No le faltó al gobernador estar presente porque el final se beneficia como presidente prorrogado del PJ y le da el control de las carpetas previas a la designación de candidatos del año que viene. Frustra, en cambio, hasta que el PJ provincial resuelva la crisis por la renuncia de
Moyano, su asunción como presidente del partido en el distrito adonde tiene que discutir una sucesión propia y, si el contexto lo requiriese, hasta una reforma constitucional que le permita un nuevo mandato, en caso de que
Cristina de Kirchner acceda ella también a una tercera elección.
Aunque parezca un envión inmovilista es todo un movimiento político que igual promoverá el debate interno. Hay que descontar que ésa no fue una decisión de los miembros de
«Gestar» - grupo que funciona hoy como conductor técnico del PJ.
En realidad traduce el mensaje de Cristina de Kirchner ala interna que ni piensa asumir como autoridad formal del partido, aunque en esa reunión del viernes 4 de mayo, que albergará Capitanich en el Chaco, la designe con alguna dignidad metafórica como jefa espiritual u honoraria del partido de gobierno.