Lecturas de sábado.
Andres Asiain y Lorena Putero sostienen que la forma más sencilla de refutar la teoría del aislamiento es con algunos datos duros de la economía. Comenzando por el tema de la inversión externa, se suele mencionar que fue superior durante la convertibilidad que en la etapa iniciada en 2003. Para sostener esa afirmación, se toman datos de inversión extranjera directa que considera inversión la compra por parte de extranjeros de empresas nacionales ya existentes, que en realidad es un proceso de extranjerización sin incremento de la capacidad productiva.
Descontando esos cambios de manos, la inversión extranjera de la convertibilidad representó 3300 millones de dólares anuales, casi la mitad de la recibida a partir de 2003: unos 6500 millones de dólares por año. Incluso si se descuenta a esa suma la reinversión de utilidades, los aportes de la inversión extranjera (directos y encubiertos vía autopréstamos) arrojan 3100 millones de dólares anuales mientras regía el 1 a 1, frente a 4200 millones por año de la actual etapa.
Igual de contundentes son los datos del comercio exterior. Es extraño que en una nación aislada las exportaciones se hayan incrementado 171 por ciento y las importaciones casi 400 por ciento entre 2003 y 2012. El hecho no se explica por la suba de precio de las materias primas, ya que las exportaciones industriales son las que crecieron a una mayor velocidad. Tan paradójico es el aislamiento que el coeficiente de apertura de 2012, medido como el peso del comercio exterior en relación con el PBI, fue de 37 por ciento (25 por ciento si se lo mide a los precios relativos de los noventa), frente al 21 por ciento promedio de la convertibilidad.
Igual de contundentes son los datos del comercio exterior. Es extraño que en una nación aislada las exportaciones se hayan incrementado 171 por ciento y las importaciones casi 400 por ciento entre 2003 y 2012. El hecho no se explica por la suba de precio de las materias primas, ya que las exportaciones industriales son las que crecieron a una mayor velocidad. Tan paradójico es el aislamiento que el coeficiente de apertura de 2012, medido como el peso del comercio exterior en relación con el PBI, fue de 37 por ciento (25 por ciento si se lo mide a los precios relativos de los noventa), frente al 21 por ciento promedio de la convertibilidad.
2 comentarios:
Y bueno, sigan mirándose el ombligo y creyendo sus propias mentiras.
Fiat acaba de anunciar una inversión de 7000 millones de dólares en Brasil de acá a 3 años... ¿y en Argentina? moneditas...
TRanquilos chicos, tranquilos... en poco tiempo más van a entende todo...
Alcides, ni una palabra sobre tu pronóstico y apuesta que hiciste por acá de la suspensión de las primarias?. Sos un caradura.
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