Leemos en La Nación:
El gobierno socialista de esta ciudad ya tiene un primer dato empírico de la influencia del desembarco de 2000 efectivos de las fuerzas de seguridad federales en busca de poner freno a la violencia atravesada por luchas territoriales muchas veces vinculadas al narcomenudeo: en mayo bajó a la mitad la cifra de heridos con armas de fuego atendidos en los hospitales locales.
Es un claro cambio de tendencia, comparado con los 120 homicidios del primer cuatrimestre. Un 40% de estos crímenes, según el fiscal regional Jorge Baclini, tiene que ver con la principal economía delictiva, que es la venta de drogas en la ciudad.