Hoy apelamos al portal independiente
chequeado.com:
Mauricio Macri, aseguró “
Hace ocho años que gobierno la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y en ocho años no tuvimos una denuncia de corrupción”.
A ver:
-Desde que Macri asumió al frente de la Jefatura de Gobierno porteña, en diciembre de 2007,
la administración del PRO recibió denuncias penales en diversas áreas de gestión.
-Justamente,
el reparto de la publicidad oficial es uno de los temas por los que fue denunciado más de una vez el Gobierno porteño.
-En octubre de 2010, la entonces legisladora porteña de la Coalición Cívica Rocío Sánchez Andía denunció a quien fuera secretario de Medios, Gregorio Centurión, y al director de Planeamiento de Medios, Rubén Azcárate, por los delitos de malversación de caudales públicos, administración infiel en perjuicio de la administración pública y negociaciones incompatibles con el ejercicio de la función pública, entre otros.
-La presentación señaló que se les asignaba buena parte de la pauta porteña a empresas vinculadas con Azcárate y con la asesora contable de la Secretaría, Alejandra Suárez.
-La causa,
radicada en el Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción 6, llegó a avanzar e incluso hubo allanamientos, pero luego quedó estancada después de que Centurión se suicidara. -En 2012,
Sánchez Andía y su par Hernán Reyes presentaron
una segunda denuncia contra la Secretaría de Medios por utilizar presuntamente la pauta oficial para posicionar a Macri a nivel nacional. Lo hicieron, según consta en la denuncia,
en base a informes internos del Gobierno porteño en donde se reconocía ese objetivo en diversas campañas mediáticas.
-La emisión de bonos públicos también fue motivo de denuncias contra el Gobierno porteño. En 2010,
la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) presentó una denuncia penal contr
a el ministro de Hacienda, Néstor Grindetti, y contra el director de Crédito Público, Abel Fernández Semhan, por el lanzamiento de los bonos
Tango S8. El escrito destacaba que
se había pagado una comisión mayor a la que habían pagado otros gobiernos provinciales en la misma época, que
un ex jefe de campaña del PRO era parte del consorcio contratado y que el dinero obtenido se había colocado a una tasa menor a la del mercado.
-En 2014,
el dirigente del GEN Martín Hourest también
se enfocó en la colocación de bonos de deuda.
Denunció a Macri, a Grindetti y al jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, por colocar bonos a un costo del 60% anual. Los delitos eran los de
defraudación por administración fraudulenta, incumplimiento de los deberes de funcionario público y negociaciones incompatibles con el ejercicio de la función pública.
-Una de las obras emblemáticas de la Ciudad,
el Metrobus de la 9 de Julio,
está siendo investigado en la Justicia por presuntos sobreprecios. La denuncia la presentaron
Facundo Di Fillipo, el ex legislador de la Coalición Cívica y actualmente asesor del legislador de Bien Común
Gustavo Vera, y el abogado
Enrique Viale en agosto de 2013. El
Metrobus Sur y el Norte también quedaron en la mira -el primero incluso
con un informe crítico de la Auditoría de la Ciudad-, pero no recibieron denuncias penales por sobreprecios
aunque sí por otras presuntas irregularidades.
-En julio de 2014,
Di Fillipo también denunció a la empresa Sbase (Subterráneos de Buenos Aires) por
la compra de coches para la Línea B. El Gobierno estaba gastando
30 millones de euros más de lo que correspondía.
-En otra denuncia que afectó
al PRO, Rodríguez Larreta, su hermano (Augusto) y su cuñada (Julieta Spina), quedaron en la mira de la Justicia porque esta última, que se desempeñaba como directora de Contenidos de Ciudad de la Moda –un programa del Ministerio de Desarrollo Económico-
se presentaba como la única oferente en las licitaciones relacionadas con ese programa.
-La
licitación de los millonarios contratos de basura fueron eje de una denuncia judicial porque
comenzaron a implementarse sin haber sido aprobados previamente por la Legislatura porteña.
-También entra en una zona gris
la causa de escuchas ilegales que habría liderado el primer jefe de la Policía Metropolitana, Jorge Palacios, en la que todavía está procesado el propio Macri.