A contrapunto de los argumentos sobre la supuesta “expertisse”, “eficiencia” y “modernización” que aportarían a la gestión estatal, levantan una serie de advertencias:
-a) el sesgo antiestatal, antipolítico y promercado que impregna la ideología de los CEO y gerentes;
-b) las lealtades que traen al seno del Estado y del gobierno quienes desarrollaron sus trayectorias en el sector privado, aumentando la probabilidad de conflictos de intereses y la permeabilidad a las presiones de los actores económicos;
-c) las dificultades para cohesionar un cuerpo de funcionarios caracterizado por compromisos políticos débiles;
-y d) la extrapolación de criterios organizacionales propios del management a la administración pública.
(Hacé click en la imagen para ampliarla).
1 comentario:
A eso hay que agregarle que intentos mejores y presididos por quien demostró ser realmente empresario exitoso en un país mucho más conservador que el nuestro, hubo un fracaso evidente de políticas semejantes, me estoy refiriendo al Chile de Piñera, un real y mejor empresario con un rol destacado en su país y América Latina con su nave insignia LAN.
Se fue del gobierno sin la menor posibilidad de dejar sucesor por el rechazo a su gobierno.
Nunca menos y abrazos
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