-A pesar del crecimiento económico de un 10% en 2021, dos de cada tres argentinos tienen una evaluación negativa de su situación financiera actual, y como mucho un tercio cree que su bolsillo y su empleo mejorarán durante este año, con el FMI y la inflación como principales obstáculos, según un relevamiento sobre expectativas económicas hecho por las consultoras Trespuntozero y Grupo de Opinión Pública.
-Ante la pregunta de cuánto mejoró su economía personal en el último año, un 61% de los encuestados afirmó estar "mal o muy mal", y solo un 31% consideró estar "bien o muy bien", cifras que abarcan especialmente a la clase media. Además, un 47% cree que su situación seguirá siendo mala dentro de un año.
-Un panorama similar se percibe en el empleo. Un 71% considera que durante 2022 se va a generar "poco o nada" de trabajo y solo un 24% estima que la creación laboral será "mucha o bastante".
Argentina tuvo un crecimiento rebote del 10% en 2021 y se espera para este año una nueva suba del PBI no inferior al 4%, mientras que la industria ya superó los niveles prepandemia y el empleo volvió a crecer. ¿Por qué, entonces, estas malas expectativas?
-"En 2021 el Gobierno tuvo muchas buenas noticias para dar, pero no lo logró capitalizar porque son noticias sueltas. Aparecen como parches y no como efecto de una política económica consistente", explican Shila Vilker y Raúl Timerman, autores del estudio.
-En ese sentido, los consultores remarcan que "no hay una voz cotidiana que explique la escena económica" a la ciudadanía en el oficialismo, en parte porque Martín Guzmán actúa más bien como un "ministro de la deuda" y no cumple la función de comunicador.
-El otro problema, afirman Vilker y Timerman, es "la inflación, que se come los ingresos y es un ajuste indirecto. El impacto de la inflación en la vida cotidiana impide cualquier capitalización" de la situación económica.
-Lo más grave es que este clima negativo va de la mano de un "fenómeno nuevo y escandaloso: que podés tener laburo formal y ser pobre", como sucede sobre todo en los sectores medio-bajos. Se trata de una situación que, aunque para muchos viene ya de hace varios años, ahora está cada vez más extendida, resaltan los analistas.
-Las expectativas económicas y la grieta:
-Más allá de que el pesimismo es generalizado, no deja de estar atravesado por la grieta. Entre quienes votaron a Alberto Fernández en 2019, un 55% cree que su situación económica será mejor dentro de un año, aunque un 20 cree que será igual o peor. Al contrario, entre quienes votaron a Mauricio Macri, solo un 15% evalúa que su economía estará mejor a comienzos de 2023, mientras que y un 74% considera que estará peor.
-"La grieta es una parte central de las expectativas. Los votantes opositores tienen menos esperanzas y los oficialistas, cuando no tienen optimismo, se refugian en la incertidumbre, guardando una carta de esperanza de todos modos", explicaron Vilker y Timerman.
Esto muestra que "las expectativas que generó Juntos por el Cambio por haber ganado la elección de noviembre pasado se esfumaron. Hay menos satisfacción con el desempeño opositor. Se percibe que sirve para castigar al oficialismo pero no para generar expectativas", agregaron.
-Qué piensa la gente sobre el acuerdo con el FMI:
-El otro punto clave para las expectativas económicas es el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, que genera en la ciudadanía, al mismo tiempo, consensos generalizados pero también lecturas divergentes a un lado y otro de la grieta.
-Por un lado, ocho de cada diez argentinos están a favor de acordar con el organismo de crédito y no caer en default. Aun así, la mayoría cree que nada bueno saldrá en lo inmediato, sino que se trata, en definitiva, de un mal necesario. "Hay ambigüedad en ese sentido", explican los consultores.
-Sin embargo, a un nivel más particular aparecen los matices. Mientras que los votantes de JxC creen que el problema es que con el Fondo encima subirán los impuestos y crecerá la emisión monetaria, los partidarios del FdT entienden que el punto negativo es el ajuste en el gasto social y en la creación de empleo.
-Dentro de estos últimos también se percibe una división, ya que la renuncia de Máximo Kirchner como jefe de Diputados del oficialismo le trajo a muchos de ellos una duda sobre la calidad real del acuerdo.
-La otra diferencia, como no podía ser de otra forma, está en el origen de la deuda y en su culpable. Los oficialistas, por supuesto, consideran que la responsabilidad es de Macri. Los opositores, en cambio, "tienen una mirada de deuda histórica y sistemática, o con origen en el gobierno de Cristina", afirman Vilker y Timerman. "El Gobierno no logró que al narrar el problema con el Fondo" se distinga eso, cerraron.
-Trabajo completo por acá.
14 comentarios:
Es como preguntar al zorro si las gallinas deben protegerse, ni tocaron nada que pudiese molestar al establishment como buenos lavagnistas, en 2002 nos llevaron a Kosteki y Santillan en 2021 a perder por escándalo las elecciones y ahora se preguntan porque a pesar del crecimiento la gente está con bronca, eso mismo pasaba cuando en 2002 exportaban cerealeras, Arcor y Techint, pero la gente no podía comer, hoy las políticas implementadas durante el Kirchnerismo como la extensión de las jubilaciones gracias a la estatización de las AFJP, la del derecho a las asignaciones familiares a todas ellas por medio de la AUH, y las redes de organizaciones sociales, entre otras cosas, eso es lo que realmente impidió el estallido porque en cada casa hubo con un.poco de ayuda asistencial algo para comer, pero estamos acostumbrados a algo más que comer,estamos acostumbrados al consumo de bienes durables que es el motor del crecimiento de las PyMEs, que son las que hoy están en peligro con el resultado de las políticas que nos impone este acuerdo con el Fondo
La expectativa es la posibilidad razonable de que un acontecimiento suceda. Es indudable la recuperación de la industria en general y las pymes en particular, las economías regionales y el impacto en el consumo y el trabajo del turismo receptivo. Negar esto es cinismo. Como negar la convivencia todavía de la pobreza, la indigencia y la pérdida del salario real y el haber jubilatorio. Estos próximos 90 días definen el 2023.
"Estamos ganando, pero tenemos un problema de expectativas"(?)
Horaccioo!!!
CK
pd: Como reman lo del FMI. Desde acá estamos absolutamente en contra de un cogobierno. Las cosas se pueden solucionar sin perder soberanía. Si la única alternativa a uh cogobierno es un default quizás no deberían estar gobernando el país.
Hay señores progresistas que se la pasan jocosamente llamando a los amarillos pensando que una supuesta derrota del FdT ellos tienen una posibilidad. No saben todavía, como en el 2015 o con Perón en el 54 por el contrato con la California, que van a ir por ellos también. O nos juntamos a pesar de las diferencias, en muchos cosos profundas, o la vamos a lamentar seriamente.
Estoy laburando controLL, hablalo con Horacio.
CK
Recuerdo cuando de la mano de Chacho Alvarez terminaron con De La Rua y pidiendo a Cavallo de ministro. Así son los progres...
Si pensáis en progres debés estar hablando de Alberto y su runfla, no conozco nada más peronista que el kirchnerismo y Cristina, que lo ha demostrado en los hechos, no en palabras sin ningún valor, y tengo edad suficiente para haber visto el primer peronismo y todos los que le siguieron. De ese primer peronismo era el "mejor que decir es hacer, mejor que prometer es realizar" y la lealtad al líder, y acá la líder indiscutible es Ella, éste que se atreve a subirse a caballo del sillón, al hacerlo demuestra quien es.
Peero ControLL, que te pasha, estash nerviosho.
Si están ganando. Si no preguntale al viejo este de la chalina.
CK
Además no hay que olvidar, ahora que se lo nombra, que Néstor comenzó su tiempo de gobierno con la continuidad de Lavagna y Prat Gay, Economía y Banco Central, hasta el primer cierre de la negociación de la deuda externa de entonces. Y con la cobertura mediática de cuatro años de Magnetto. Hombre pragmático y peronista si los hay y hubo!!!.
Ay ControLL, yo no lo nombraría a Magnetto, porque vistessss. Al quetejedi dócil con la embajada lo sindicaron alfil de Magnetto dentro de uno de los gobiernos. Mejor usa otro ejemplo.
Néstor sembró, pero a ustedes no les gusta la cosecha. Y encima piden el voto.
CK
Lo lamento si te molesta, pero es la realudad no sueños infantiles. Clarín le dio en esos 4 años del kirhnerismo todas las tapas posltivas.
Ay controLL, la realidad, que está 10 puntos. Solo que deben tener un problema de comunicación.
Encima te argumentás en contra con eso de las tapas de Clarín. Así no hay Barcelona que aguante. Igual, se entiende. Es laburo. (Punto para Alberto)
CK
"Néstor comenzó su tiempo de gobierno con la continuidad de Lavagna y Prat Gay, Economía y Banco Central, hasta el primer cierre de la negociación de la deuda externa de entonces", además eso era parte de los míos, los tuyos y los nuestros de la alianza electoral con el Zabeca, que se rompió en 2005, y Lavagna, un miserable en economía que al igual que hoy permitió exhorbitantes ganancias de exportadores mientras acá trataban de inventar la supersopa y las PyMEs trataban de no quebrar entre el dólar a $3 y $4 y un mercado sin un peso, fue eyectado cuando pretendió frenar la economía aumentando las tarifas (esto me suena muy familiar), suerte que corrió también Prat Gay por un caso similar. Es que a la inversa del Zabeca y Alberto, la dirección política de la economía la tuvieron con mano firme Néstor y Cristina, y el resultado fue un pueblo feliz
Es bueno que lo recordemos, Norberto. Néstor fue un peronista pragmático con principios como Perón. No dudó de emplear todos los recursos humanos que tenía a disposición de acuerdo al momento. Luego del 2005 que "se rompió" los fue a buscar para rearmar el PJ, especialmente a Lavagna.
Febrero 2008:
"Roberto Lavagna y Néstor Kirchner mantuvieron dos reuniones, el jueves y el viernes pasados, en las que acordaron ampliar la base política del gobierno nacional y que el ex ministro de Economía pueda tener un lugar en la conducción del Partido Justicialista.
Kirchner admitió que con Lavagna coincidió en "la necesidad de reorganizar al justicialismo como un partido de centro progresista, respetando la diversidad interna y dando espacio a las distintas expresiones partidarias".
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