Pero mientras el caso continúa en la Justicia, se encargó de hacer trascender a amigos de la prensa que recibió un llamado a regresar al ruedo: un pequeño grupo de hombres vinculados al deporte, le pidieron al histórico comentarista para que regrese a la política. “Hay que estar tranquilos, después lo hablaré con quien corresponda”, respondió, no negando la intención de retornar.
Con perfil bajo el domingo se acercó al búnker de Cambiemos en Costa Salguero. Caminó hasta el VIP principal, donde se le franqueó el ingreso y tuvo tiempo de saborear otra vez las mieles de la política macrista.
Mientras tanto sigue siendo una incógnita quién autorizó políticamente los 23 millones de pesos a una empresa fantasma de su autoría y el destino real de los mismos.