domingo, 20 de mayo de 2012

cuando lo inusual de argentina se convierte en un elogio

“Lo que el Gobierno hizo bien es que no sacrificaron el empleo y el crecimiento del país, en orden de bajar la inflación; eso es inusual en el mundo de hoy”, recalcó Mark Weisbrot el analista del Center for Economic and Policy Reasearch (CERP), un centro de estudios cada vez más escuchado por el poder político y económico mundial, a la luz de la evolución de la crisis global, sobre todo en Europa.
Además vaticinó que a este ritmo puede convertirse en el primer país de América Latina de "ingreso alto” y apoyó el retorno del control estatal de YPF.
Una luz en el túnel. 
(leé la nota completa acá).

hijos del rigor

Una hora después de que el ministro de Planificación Federal Julio De Vido dijera en conferencia de prensa que Metrovías “no estaba manejando de manera responsable la concesión del subte”, tres autos de alta gama estacionaron en la puerta del Ministerio de Trabajo en Alem 650. De uno de ellos bajó Aldo Roggio acompañado de tres asesores. 
El CEO se presentó ante los empleados de seguridad del hall de entrada y subió a los pisos altos del edificio, donde están las oficinas de las máximas autoridades de la cartera laboral. Roggio llevaba una propuesta salarial para resolver el conflicto con los trabajadores del subte. En la planta baja, un puñado de los metrodelegados se sorprendió al ver al principal ejecutivo de la firma. “A las paritarias siempre viene Daniel Pagliero, el gerente de recursos humanos de la empresa, nunca Aldo Roggio”, deslizó a este cronista un delegado de los trabajadores testigo de la escena.

hablando de la corrupción en angola

Consultado por Eduardo Anguita el escritor, economista y ex embajador en Angola, Eduardo Sguiglia, sobre el viaje de la Presidenta a ese país, se mostró muy entusiasta. Más que por el esfuerzo genuino de vender productos, Sguiglia destacó la importancia de abrir las relaciones con África y, en ese sentido, aclaró que Angola juega un papel muy importante en la región. 
El intento de desmerecer a ese país africano (recordemos qué pensaban Clarín y La Nación) por parte de la prensa opositora tiene demasiado tufillo a desprecio racial y a desconocer la importancia de la integración Sur-Sur
Sería interesante, para que no se vuelvan más papistas que el Papa, que esos medios consulten la página de la CIA y vean que la valoración de esa agencia dista mucho de la consideración de que Angola “es el país más corrupto de la Tierra”. Es más, allí hay suficientes datos sobre cómo millones de angolanos volvieron a su país en los últimos años en virtud del mejoramiento del clima social y político y también por los avances económicos.
Lo que no pueden ver los que ahora descubrieron lo feo que es Angola es que el Gobierno da muestras de que se desvela por cumplir con las obligaciones externas pero que está en camino de achicar los márgenes de impunidad de grupos empresariales favorecidos por la dictadura de la que formaron parte y por el neoliberalismo que dejó al país al borde de la disolución
Y, en ese camino, es más que valiosa una política exterior abierta y comprometida con naciones que salieron del yugo colonial.