El 26 de junio de 2004, el estigmatizado
Luis D’Elía y un grupo de militantes y vecinos de
La Boca ocuparon las instalaciones de la comisaría 24.ª del barrio porteño, a consecuencia del crimen del dirigente comunitario
Martín Oso Cisneros, señalando que los asesinos contaban con protección policial.
Aquel episodio estuvo presente este lunes en el recuerdo de varios.
1 comentario:
Recuerdo la brutalidad de los medios con D'Elía en aquel momento, que no cesó, de hecho. Hubo otros episodios más cercanos, en localidades de la provincia, en los que incluso se felicitaba a los vecinos por hacer justicia por las suyas. Nada dijeron cuando se supo que el presunto asesino era inocente, pero bastaba saber que el intendente era kirchnerista. No son distintas varas: es una sola vara y la tienen ellos. Saludos
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