de mendiguren lo anda buscando a morales sola desde el domingo

Morales Sola en la edición dominguera de La Nación:

La política le ha puesto un nombre al proyecto oficialista de domesticar a los críticos. Lo llama lamendigurización de todos los discursos públicos. Se refiere a la política y al contenido discursivo del presidente de la Unión Industrial, Ignacio de Mendiguren. El líder industrial elogia al modelo, a la Presidenta y a su marido; se olvidó de la inflación, de la seguridad jurídica, de la falta de inversión y de las políticas estatistas que los empresarios critican en la intimidad. Desde las últimas elecciones, se parece más a un funcionario que a un dirigente sectorial. Lo que yo tengo que hacer es influir y no criticar , explica De Mendiguren. Es la mejor definición de un lobbista.

José Ignacio De Mendiguren, presidente de la UIA en un diálogo hoy con Víctor Hugo en radio Continental:
“Me sorprende una interpretación tan rápida y sesgada por parte de Morales Solá. Si demendigurizar es dialogar, llegar acuerdos, es lograr que estén todos los empresarios, si demendigurizan es llamar a la unidad nacional, juntar a la juventud empresaria con la juventud sindical, es tratar de ver la película y no la foto entonces ojalá que nos sigamos demendigurizando. Nosotros no participamos en política pero si defendemos políticas. Yo el planteo lo hago en televisión y delante de muchas personas. El que gobierno es el gobierno y nuestra responsabilidad es llevarle nuestras ideas para que si les parece que las apliquen. La política es la que debe cambiar la política. La confrontación permanente y la crítica permanente no sirven. Desde el día de ayer estoy intentando hablar con Morales Solá y no puedo. Me hubiera gustado ir a su programa. Me gustaría que me invitara esta noche para que este debate lo podamos tener con la gente. Yo tengo ideas y propuesta y eso es lo que quiero debatir”.

comienzan a llegar las primeras autocrítas

Además nos dice Joaquín:
Dando saltos entre el error y el bochorno, la oposición ha llegado, tal vez, al nivel más profundo de su impotencia. Ayer se agregó la posibilidad de que Mauricio Macri termine no compitiendo por la presidencia en octubre, sino por la jefatura del gobierno capitalino en julio. En el último fin de semana, lo poco que quedaba del peronismo disidente implosionó; se disolvió en el aire. El radicalismo oscila entre una variante ideológica de centroizquierda, la de Ricardo Alfonsín, y otra más débil y más aperturista, la de Ernesto Sanz.
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Las últimas encuestas que le llegaron señalan que la Presidenta estaría ganando ahora en primera vuelta, pero podría ser forzada a un ballottage si la oposición estuviera mínimamente organizada. El problema es que también hay obstáculos en la segunda vuelta. La mitad del radicalismo votaría por Cristina Kirchner si el otro candidato del ballottage fuera Macri. En cambio, el 60% de los votantes de Macri votarían increíblemente por la Presidenta en la segunda vuelta si su contrincante fuera Alfonsín. 
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El peronismo disidente es ahora una alianza de dirigentes sin fuerza ni territorios; prácticamente fue colonizado por los hermanos Rodríguez Saá, los únicos que tienen influencia en un solo distrito, San Luis. Los otros dos dirigentes que comandan esa esquelética fuerza son el misionero Ramón Puerta, que salió tercero en la última elección en su provincia, y el salteño Juan Carlos Romero, que ni siquiera presentó alternativa ante Juan Manuel Urtubey en los recientes comicios de su provincia.
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Duro Joaquín con la oposicíon. Solo le falta ahora reconocer el aliento y la letra que los medios concentrados les estuvieron dando.
Un poco de autocrítica. Con eso ya estamos.

de golpe morales sola y la oposición empiezan a darse cuenta

Leemos en su columna de La Nación a Morales Sola y observamos que una mueca de dolor y talvez algunas lágrimas recorrieron su rostro:
Primero reconoce que "...reuniones secretas, conversaciones en voz baja y trascendidos apenas audibles rondan sobre qué deberían hacer los antikirchneristas..."
Luego lamenta llegar a dos constataciones:
La primera constatación a la que llegó la oposición es que han dejado de existir, por ahora al menos, los tres tercios en lo que se repartía hasta hace poco el electorado. Uno de esos tercios, el del oficialismo, ha crecido, pero mucho más han descendido los otros dos tercios de la oposición, que ya no son dos tercios. Estos estaban formados por el arco no peronista y por el peronismo disidente.
La segunda constatación que conmovió a la oposición, aunque no lo diga, es que Cristina Kirchner pasa por su mejor momento político desde que accedió personalmente al poder. Arropada por un porcentaje importante de la sociedad, que no está dispuesta por ahora a ver los muchos y peligrosos errores de su gobierno, la Presidenta se beneficia también de la falta de alternativas políticas. Ella cosecha en sectores sociales conformes con el alto nivel de consumo. La economía soporta una inflación alta, pero compensada con aumentos salariales y créditos. El equipo de campaña de Cristina es una máquina que produce hasta cuando ella duerme".
Gracias, Joaquín. Me voy a dormir un par de horas.

cuando al difamador no le gusta que lo señalen

El diario La Nación publica hoy una extensa nota –sin firma- titulada “Morales Solá denuncia una campaña sucia”. Allí, consigna que “Joaquín Morales Solá denunció ante la jueza federal María Servini de Cubría que es víctima de una campaña de desprestigio profesional y de persecución personal por parte de la ex SIDE, de funcionarios del Gobierno y de medios de comunicación públicos y privados financiados por el Estado. El periodista entregó un escrito a la juez en el marco de una citación como testigo, en la causa sobre el Operativo Independencia en Tucumán y la actuación de su primer jefe, el general Vilas, en 1975”. (DsD).
Joaquín: nadie debe sentir temor cuando la democracia y la historia interrogan.
Salvo que...

¿dónde guarda morales sola el pergamino que le regaló bussi?

Se trata de aquel asado con Bussi.

El periodista Hernán López Echagüe mantuvo un fuerte intercambio epistolar con Morales Solá luego de revelar en una carta de lectores de la revista Veintitrés una anécdota que el periodista de La Nación atribuyó a un “pecado de juventud”. Se trata del asado que en marzo de 1976 compartieron Leo Gleizer, Renée Salas, Marcos Taire y Morales Solá, entre otros periodistas, con el genocida Bussi en los salones del Regimiento de Infantería 19, en San Miguel de Tucumán.
“Al cabo del almuerzo, el general obsequió a cada uno de los periodistas presentes un pergamino en el que agradecía “su colaboración en la lucha contra la subversión”, que el columnista recibió sin inmutarse, para luego buscar el abrazo del general”, relató López Echagüe.
Pequeñas historias del periodismo independiente.

cuando una foto aclara

Recordamos aquella foto publicada la semana anterior de Morales Sola acompañando un operativo de Bussi.
Y leemos:

"Consultado para esta nota, Oscar Gijena, secretario general del Sindicato de Prensa de Tucumán, me relató cómo funcionaba la redacción del diario tucumano.“Había algunos periodistas que por miedo o temor a perder sus familias publicaban todo lo que Bussi les decía en las reuniones que se realizaban en su despacho militar. Lo hacían porque no les quedaba otra. Pero había casos como el de Joaquín Morales Solá, que lejos de tener miedo, alentaban la publicación de los escritos militares o mejor dicho arengaban a la tropa”, recordó".

(De la nota de Ramiro Rearte)

morales sola: el cerebro del "operativo sobornos"

Durante el gobierno de Fernando de la Rúa, un comentario con fuente en “off” dentro de una columna de Joaquín Morales Solá fue el inicio de lo que luego se conocería como el escándalo de “los sobornos en el Senado”. El columnista había asegurado en aquella oportunidad que senadores habrían recibido “favores personales” para aprobar una reforma laboral enviada por el Ejecutivo.
En los últimos días, Morales Solá volvió a sugerir, con tres notas, la posibilidad de que haya habido intercambios entre la Casa Rosada y miembros de la Cámara alta.
Aunque, esta vez, la saga no comenzó con un testimonio en “off” sino con comentarios públicos de varios dirigentes de la oposición durante un acto en la exposición Rural de Palermo.
La primera nota al respecto la publicó el pasado 28 de julio y llevó el título “El Senado, bajo las peores sospechas”. La segunda fue el 1º de agosto, en la que el columnista insistió con las sospechas bajo el título “Las sospechosas deserciones en el Senado”. Por último, ayer volvió sobre el asunto con su columna titulada “Poder, dinero y miedo”.
Las sospechas de Morales Solá aún no se convirtieron en noticias de portada. Aunque ayer logró que se plegara al tema su colega de Clarín, Eduardo van der Kooy, quien firmó una columna bajo el título “El kirchnerismo logra bloquear a la oposición, pero se llena de barro”. Allí retomó la temática de su colega, con epicentro en la senadora rosarina Roxana Latorre.

(resúmen DsD)