¿Hay sicarios en Rosario? ¿Hay realmente un brazo armado de las bandas narco, o grupos armados a los que se contrata para cometer un asesinato? Si se repasan las investigaciones judiciales queda claro que las bandas no necesitan sicarios para sus venganzas. En la pelea entre Los Monos y Los Garompa, una sangrienta saga que dejó una treintena de muertos, los que terminaban presos eran los miembros de ambos grupos, no terceros contratados para matar. Ni el tamaño ni el poder de fuego de la bandas, ni el territorio en disputa permitieron construir una industria del crimen, con oficios y jerarquías diferenciadas al estilo de un gran cartel.
El criminólogo Enrique Font, que lleva adelante investigaciones en territorio desde la Universidad Nacional de Rosario, sostiene que en esa ciudad no hay nada que se parezca a una banda colombiana o mexicana. “Hay pistoleros, hay asesinatos por encargo, pero no sicarios. Hay gente que integra una banda y también mata. Pero nadie podría vivir de eso”, sostiene.
Y afirma que si se analizan los homicidios en Rosario son muy pocos los que se realizan por encargo, ya que no hay una industria: “Hay algunos homicidios entre bandas y alguien que los hace, pero no hay una industria del crimen. Incluso son hechos comunes en los ámbitos penitenciarios”.
(Aporte de Silvina Tamous para aclarar otra truchada).