-Si llegamos hasta aquí, con posibilidades reales de construir un nuevo gobierno nacional y popular no fue por casualidades. Pasaron cosas...
-Partamos de la firmeza de convicciones de CFK, su comprensión del momento político en la construcción de una unidad más amplia como coalición electoral y de futura gestión.
-Eso implica que el discurso, especialmente en sus formas, del movimiento se ha corrido hacia un centro políticamente correcto hacia un electorado que nos mira de reojo.
-Y también entiendo que todos debemos aportar a una estrategia en común y que el gobierno utiliza todo para rehuir al debate central de su fracaso.
-Pero esa reubicación del discurso, que tenemos que volver mejores, no nos puede hacer perder la esencia de lo que somos y la defensa de los que siempre están.
-Así como reivindico a Alberto Rodriguez Saa que trajo esa energía del "hay 2019" cuando muchos estaban especulando y otros claudicando con el 2023 lo mismo va para Dady Brieva.
-Llevó a discutir culturalmente al peronismo en el mismo corazón de los medios hegemónicos casi como un voz solitaria en estos tres años y medio, cuando arreciaba el discurso de los "70 años de decadencia" puso su alma y su prestigio en defender una historia y el futuro.
-Donde tenía más que perder que ganar, sin esperar nada a cambio. No merece ahora que lo dejemos solitario a él y a otros, en medio de los leones del sistema.
-Y siempre sostuvo que había que ampliar la mesa pero con CFK adentro.
-Gracias Dady por estar. Dios vomita a los tibios. Un abrazo.