Imagen de Lula
Sobre la intervención del ejército en la represión.
-Más de seis de cada diez habitantes del área metropolitana no dudan en que lo de Bolivia fue un golpe de estado, mientas que sólo una minoría del 26 por ciento acompaña la postura de los gobiernos argentino y norteamericano de que no se trató de un golpe.
-Como se ve en el global, no hay ocho puntos de diferencia, como hubo en las elecciones del 27 de octubre, sino muchísimo más. Por ejemplo, el 62 por ciento opinó que en Bolivia hubo un golpe y sólo el 26 por ciento piensa que no fue golpe. Nada que ver con el 47 a 40 que se registró en las urnas argentinas. Esa diferencia mayor se explica porque hay más homegeneidad entre los que votaron a Fernández--Fernández. En Cambiemos, una parte de los que respaldaron a Macri--Pichetto, el 20 por ciento, opinan que sí hubo un golpe. Esa postura se reflejó mucho en votantes radicales y en una parte de los dirigentes de la UCR que condenaron el golpe.
-Casi en paralelo, seis de cada diez dice que está de acuerdo con las movilizaciones en Chile.
-Una mayoría sólida se aparta también del enfoque que tienen los medios que supuestamente tienen más llegada.
-Gran parte de los que pusieron en la urna la boleta de Juntos por el Cambio no sólo niega la existencia de un golpe sino que apoya la intervención del ejército.
-Lo mismo ocurre con Chile, una mayoría que opina mal de Piñera y apoya las movilizaciones. Nuevamente, hay una franja que votó a Macri--Pichetto que está de acuerdo en que los militares intervengan, un dato deplorable si se considera que ya suman más de 20 los muertos.
-Lo mismo ocurre con Chile, una mayoría que opina mal de Piñera y apoya las movilizaciones. Nuevamente, hay una franja que votó a Macri--Pichetto que está de acuerdo en que los militares intervengan, un dato deplorable si se considera que ya suman más de 20 los muertos.
-También hay una mayoría que tiene una buena o muy buena opinión de Luis Ignacio Lula Da Silva y está de acuerdo con su libertad, mientras que hay una minoría, una de cada cuatro personas, que opina bien o muy bien de Jair Bolsonaro.
-Cuando se plantea con quién debe privilegiar relaciones el inminente gobierno de Alberto Fernández aparece Latinoamérica como primera alternativa elegida, con Europa y Estados Unidos un poco más atrás.
-Las conclusiones surgen de una amplia encuesta realizada por Aresco, la consultora que lidera Aurelio. En total se entrevistaron 2002 personas de la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense, respetándose las proporciones por edad, sexo y nivel económico--social. Las entrevistas fueron telefónicas.
-Las conclusiones surgen de una amplia encuesta realizada por Aresco, la consultora que lidera Aurelio. En total se entrevistaron 2002 personas de la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense, respetándose las proporciones por edad, sexo y nivel económico--social. Las entrevistas fueron telefónicas.
-El área metropolitana constituye una buena mezcla porque combina un distrito donde Mauricio Macri ganó la elección del 27 de octubre, con un territorio, el conurbano, en el que se impuso claramente la fórmula que encabezó Alberto Fernández.