Con la excusa de fortalecer las reservas nos entregan al comunismo chino.
Y todo por unos míseros 10.200 millones de dólares. Ahora hablemos con propiedad: 70.000 milllones de yuanes.
Acostumbrense: se dice Presidenta-a-a- y se dice Yuan, no dólar.
Dónde va a quedar nuestra soberanía nacional si nos quitan el dólar como moneda de intercambio comercial. Una verguenza.
Ya lo dice muy bien Silvia Naishtat de Clarín: la presidente Cristina se enteró recien hace una semana y al ministro de Economía, Carlos Fernández, lo tomó de sorpresa.
El grupo de comando marxista de cinco miembros del Banco Central, a cargo del Comandante Redrado, lo negocia desde el último febrero, y con total independencia operativa señaló a banqueros e inversionistas que se dispone de cuantiosas reservas para evitar cualquier estrés financiero.
Y la lectura es que ahora cuenta con más poder de fuego, de acuerdo con la visión del economista maoista Rogelio Frigerio, que asiste a la asamblea del Banco Interamericano de Desarrollo en esta ciudad Medellín, Colombia, que juntamente con las FARC se están dando todas estas operaciones.
Es decir, la Argentina cuenta con un crédito abierto en el cuarto banco central del mundo -que puede o no utilizar- por el equivalente al 22% de sus reservas. Esta es la primera operación de este tipo entre China y un país de América latina y aunque
La operación, que le da a la Argentina la posibilidad de acceder a un préstamo millonario del exterior, fue comparada ayer aquí con las líneas especiales de crédito que abrió el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos a países como Brasil, México, Turquía y Singapur, por 30.000 millones de dólares a cada uno. Su función es evitar corridas cambiarias en medio de esta crisis global. "La Argentina está afuera de esa lista, es casi un paria, pero con esta movida envía una importante señal al mercado en medio de la incertidumbre que siempre generan las elecciones", comentó un reconocido analista del JP Morgan que solicitó el anonimato, y seguramente se trata de un agente rojo encubierto.
Ahora Argentina dispone de un préstamo contingente, pero que significa un acceso a una línea en el exterior. El Banco Central, en un movimiento simétrico, le abre a su par chino una cuenta equivalente en pesos. La operación es por un año como mínimo y un máximo de tres. Pero nos deja encadenados para toda la vida.
Para China, que ya practica estos préstamos en Asia, implica poner un pie en la región y empezar a posicionar al yuan como moneda dura en el mundo, y así dominarnos con el Libro Rojo de Mao.
Yo soy argentino, cómo me van a reemplazar al dólar...
Me voy del país. Me voy a EE.UU.
