En el año 2003 abandonó el directorio de la aerolinea al tiempo que decretó la bancarrota, y en 2011 fue sobreseído en la causa del accidente por el Tribunal Oral Federal Nº4, cuando se declaró como prescripta.
Participó como accionista en distintas empresas, incluyendo Casa Tía, compañía perteneciente a la familia del político Francisco De Narvaez, en donde se formó como hombre de negocios.
La noche del accidente del Aeroparque, Deutsch estaba cenando con su esposa Graciela en lo de Bernardo Beustadt. Lo llamo el Colorado y le dijo que iban a necesitar un abogado. Su primera reacción fue llamar a su agente de seguros en París.