Leemos en Clarín que sin datos concretos de cuál será el nuevo eje proselitista, el ex presidente,
Eduardo Duhalde, apuntará a focalizar su campaña en un único punto:
sus candidatos a legisladores nacionales por la provincia de Buenos Aires. En esa nómina, aparecen sus piezas claves: su mujer, la senadora,
Chiche Duhalde; el ex funcionario nacional y ex gobernador bonaerense,
Carlos Ruckauf; la actual diputada nacional,
Graciela Camaño y su amigo personal y ex secretario de Legal y Técnica,
Antonio Arcuri.
El gobernador chubutense fijó su posición y la diáspora arrancó por dentro
. Das Neves anticipó que no hará más campaña en la provincia de Buenos Aires.
Graciela Camaño y la candidata a vicegobernadora,
Claudia Rucci, fueron otras voces que plantearon sumarse a la autocrítica que pidió el chubutense.
Los cortocircuitos arrancaron la misma noche de las primarias cuando
Duhalde se refirió a las
“banderas subversivas”
en el bunker del kirchnerismo y siguieron con las denuncias de fraude.
Las mismas fuentes confirmaron que
Duhalde y Das Neves no volvieron a hablarse, desde el encuentro del viernes, en las “62 Organizaciones Peronistas”.
Otro de los problemas internos que deberá afrontar Unión Popular
es el financiamiento de la campaña para el 23 de octubre.
Algunos integrantes del comando de campaña afirmaron que continuar con la campaña será
“tirar dinero a la basura”. Algunos sostuvieron que el alejamiento de
Das Neves afectó la llegada de fondos.
Ese será un tema a tratar en los próximos días.
“¿De dónde va a salir el dinero para más campaña? No sabemos”, confirmaron ayer en el duhaldismo a última hora.